En la práctica, se aplica un estímulo térmico en la cola del animal. Cuando el roedor siente incomodidad intenta retirar la cola (tail flick) de la fuente de calor. Los cambios en los tiempos de latencia de retirada de la cola o tiempo de reacción del animal reflejan entonces la sensibilidad al dolor de la animal.
Una de las diferencias entre esta prueba con el test de la placa caliente es que en el test de la retirada de la cola se puede repetir la medición en el mismo animal (con la condición de respectar un intervalo de tiempo mínimo entre las mediciones – aproximadamente 5 min); antes y después de la administración de un fármaco por ejemplo.
En esta prueba, solo se pueden conseguir datos fiables cuando el animal está tranquilo e inmóvil durante la medición. Se utiliza comúnmente un cepo para restringir los movimientos del animal. En este contexto, es muy importante habituar el animal a las condiciones experimentales para minimizar el estrés durante la medición. Experimentadores con mucha experiencia puede consiguen hacer la prueba si necesidad de un cepo.
La prueba de la retirada de la cola tiene una gran sensibilidad para estudiar los efectos analgésicos de los fármacos. Se pueden utilizar también para determinar las variaciones de sensibilidad al dolor térmico en diferentes situaciones experimentales o en animales modificados genéticamente.