La prueba de la placa caliente (Hot Plate test) se utiliza comúnmente para evaluar la sensibilidad al dolor térmico.
La prueba de la placa caliente es un test sencillo y rápido para detectar las propiedades analgésicas de las drogas en roedores. También se utiliza para estudiar los cambios de la sensibilidad al dolor en respuesta a manipulaciones experimentales o genéticas. Este método se describió inicialmente por N.B. Eddy and D. Leimbach (1953) y consiste en evaluar los tiempos de reacción en respuesta al contacto de las patas del animal con una placa caliente.
Esta prueba consiste en introducir una rata o un ratón en un espacio cilíndrico abierto por arriba y colocado encima de una placa caliente. La placa se mantiene a una temperatura constante y se mide la latencia de reacción del animal que se manifiesta de dos maneras: el lametón de las patas y el salto. Ambas respuestas se consideran como respuestas integradas supraespinales.
Una particularidad de esta prueba es que solo se puede aplicar una vez en cada animal, solo en el caso en el que se ha evaluado la respuesta del salto. Efectivamente, cuando se ha hecho un experimento con el animal, este ha aprendido que el experimentador le ha sacado del cilindro cuando ha saltado. A partir de este momento, una vez que se pone el animal encima de la placa caliente, salta muy rápidamente (después de unos segundos) si expresar las conductas de lametón (Licking) iniciales.
Source of information: Le Bars D et al. Animal Models of Nociception. Pharmacological Reviews. (2001) 53(4):597-652, see Related links)